Suponga que me encuentro con un hombre que está
plantando semillas, lo saludo y le digo: “¿qué semilla está sembrando?
“Semillas”, dice como respuesta
“¿Qué clase de semilla?”
“No sé”.
Entonces le pregunto: “bueno, ¿no sabe si es
buena o mala?
“No, no podría decirlo”, dice. “Pero es semilla”.
Eso es todo lo que quiero saber, y la estoy sembrando”.
Usted diría que este hombre es un lunático de
primera, ¿verdad? Pero él no estaría la mitad de loco como el hombre que sigue
sembrando por toda la eternidad y nunca se pregunta qué está sembrando o de qué
será la cosecha.
Mucha gente trabaja sin descanso en esta vida y nunca se
detiene a pensar qué semilla están plantando, en qué están invirtiendo, hacia
dónde va su energía. Sabio es el hombre que sabe qué clase de semilla está
plantando.
Todo lo que el
hombre sembrare, eso también segará.
Tomado del Libro D. L. Moody
No hay comentarios:
Publicar un comentario